Hoy te habla la ex-miedosa-a-expresar-lo-que-siente.
Y no es que yo tuviera miedo a expresar lo que sentía. Tenía terror. Terror a que se rieran de mí, a que me insultaran, a ser ridiculizada en público, a expresar todo lo que sentía y que aún así no me hicieran caso, miedo a que nadie pudiera ayudarme por ser absolutamente rara…
Ahora me doy cuenta que tenía vergüenza de mis propios sentimientos y prefería ignorarlos. Mejor dicho, prefería hacer como que los ignoraba.
La importancia de poner palabras a lo que sientes
A la mayoría no nos han enseñado a expresar lo que sentimos. Es más, parece que nos han educado a hacer lo contrario: pon cara de felicidad cuando estás triste. Di que pasas de todo cuando tienes mucha preocupación por lo que será de ti mañana. Hazles creer a todos que estás bien cuando sólo quieres esconderte para llorar. Hazlo, disimula, pero no puedes ignorar lo que estás sintiendo.
Pero en lo más profundo de ti hay algo que está escuchando esos sentimientos callados. Cuando sea más lo que callas que lo que dices, tu cuerpo se va a poner a hablar por ti.
Tu cuerpo, ese que tú creías que se volvía loco y de repente te mandaba un retortijón, un esguince o una gripe, no está loco. Ya te lo he dicho más veces. La biología sigue una lógica precisa y cuando detecta que hay un pensamiento repetitivo y absolutamente estresante, activa un mecanismo con el que aliviar ese estrés psíquico, pasando a lo físico.
Como dice Leon Renard, «el lenguaje simbólico del cuerpo tan sólo se manifiesta si el aviso de lo psíquico no ha sido visto, escuchado, entendido y no se ha corregido la situación.
Todo aquello que no podemos aceptar, todo lo que no sepamos expresar mediante palabras, emociones y actos, el cuerpo nos lo dirá, lo gritará o aullará hasta la muerte por medio de desequilibrios.»
Beneficios de expresar los sentimientos y emociones
1.- Expresar tus sentimientos permite que te conozcas
Cuando te escuchas diciendo lo que sientes, estás aceptándote, dándote el permiso y el valor a tus sentimientos y emociones. Tus palabras están permitiéndote abrir caminos.
Si te escuchas cuando hablas, y no es algo que se hace de forma natural porque hay que poner mucha conciencia en ello, llegas a sorprenderte de lo que escuchas.
Si te escucharas cuando hablas, te sorprenderías de lo escuchado
En las sesiones, me pongo mis orejas de elefante Dumbo y escucho todas las palabras que dicen mis clientes al explicarme su historia.
Cuando minutos después se las repito de forma literal, la persona alucina de haber dicho eso. No se reconoce en lo que ha dicho. Es como si quien hablaba no hubiera escuchado ni una sola de sus palabras.
Y ese es el objetivo de la Escucha Biológica. Escuchar a tu cuerpo, escucharte a ti y re-conocerte. Conocer qué es lo que te hace sufrir, lo que te hace feliz, lo que te preocupa y lo que no.
El miedo lo pierdes al experimentar los beneficios de expresar lo que sientes.
Ya has dado el primer paso a superar el miedo a tus sentimientos y emociones, y hay un deseo de mejorar y conocerte.
2.- Creces al expresar tus sentimientos
¿Qué pasa cuando te conoces? Que creces.
Ya no eres esa pequeña personita que tenía miedo a que en el cole se rieran de ella si lloraba, o la que pensaba que estaba mejor callada. Ahora eres la persona que sabe que su opinión cuenta tanto como la opinión de los demás y la expresa, la que pide ayuda de forma racional y no mediante gritos, la que apuesta por cumplir sus sueños…
Hay un crecimiento porque te haces responsable de tus sentimientos y emociones, y no los dejas en manos de otros.
Ya no necesitas que «mamá y papá» te pregunten qué te pasa. Tú eres capaz de manifestarte y tomar acción para conseguir lo que quieres.
3.- Expresar tus sentimientos es prevenir
Ahora que ya sabes que el estrés emocional se manifiesta en el cuerpo, ¿por qué no usas este «saber» para prevenir? ¿Te acuerdas de ese programa que se llamaba «más vale prevenir que curar»? Pues está en tu mano prevenir.
Vamos a evitar que el estrés se desborde. Vamos a anticiparnos a las situaciones difíciles con herramientas con las que gestionar nuestros pensamientos, sentimientos y emociones.
Cuando sufres una enfermedad y escuchas a tu cuerpo adquieres un conocimiento de ti que no obtienes de otra forma. Comprendes su mensaje y haces cambios a nivel emocional porque aprendes una lección que no se te va a olvidar.
Yo sufrí los efectos de la fibromialgia durante varios años. Hoy disfruto de una vida saludable practicando deporte, viajando y desarrollando diversos proyectos profesionales. Y pongo mucha atención en mi salud emocional para prevenir.
Aprendí que fue lo que me hizo enfermarme, y soy consciente de qué es lo que puede hacerme empeorar.
Prevenir emocionalmente una enfermedad es conocer qué EXPERIENCIAS pueden desbordar tu estrés y gestionarlas correctamente cuando aparecen.
Por esto, no me cansaré de pedirte que expreses lo que sientes. Tus miedos, tus angustias, tus preocupaciones, porque para mí ha sido y es, la mejor vía para conocerme, crecer y disfrutar de una vida saludable.
Ahora me conozco más y mejor.
Hasta que haces el camino que te lleva a lo más profundo de ti, y descubres lo que hay en esa profundidad, no sabes si eres lo que te han dicho que seas, eres lo contrario a lo que te han dicho que seas, o simplemente repites un patrón familiar.
Expresa con escritura terapéutica las palabras que están en el fondo de tu alma.
Esta mañana he leído la biografía de un escritor del que decían que «devolvía a la vida las palabras».
Me ha emocionado y por eso la adapto a lo que más nos importa. Creo que guardamos muchas palabras sin vida bajo la piel y debemos devolverlas a la vida.
Expresar nuestros sentimientos y emociones da vida a lo mejor que tenemos.
Me encanta mi profesión porque ayudo a eso que hace el escritor, a devolver vida a las palabras calladas, que gritan desde el fondo del alma y se convierten en síntoma buscando ser escuchadas.
Para perder el miedo a expresar tus pensamientos, sentimientos y emociones, puedes hacer el Curso de Biodescodificación y Escritura Terapéutica «CATARSIS» que he creado para que, a través de diferentes ejercicios y meditaciones puedas liberarte de emociones negativas que llevas cargando desde hace mucho tiempo. La escritura terapéutica tiene diferentes beneficios demostrados, entre los que están:
- salud inmunológica más fuerte,
- mejores hábitos de sueño,
- salud mental mejorada,
- presión arterial regulada,
- reducción del dolor causado por enfermedades crónicas